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El lavavajillas es un electrodoméstico que nos hace la vida más fácil cada día. No tener que fregar a mano sartenes grasientas, cacerolas, platos, vasos y demás utensilios de cocina es una verdadera suerte. Sin embargo, son muchos los que no saben sacar el máximo partido a este práctico aparato. Y es que, al saber aprovechar todo el potencial de nuestro lavavajillas; dejaremos la vajilla bien limpia y brillante, además de ahorrar energía.
Como usar un lavavajillas
Retira los restos de comida
Es importante retirar los restos de comida antes introducir la vajilla. De hecho, lo recomiendan los propios fabricantes; puesto que, de lo contrario, se podrían bloquear el desagüe y ocasionar una avería.
Deja un poco de espacio entre la vajilla
Un truco muy práctico para que la vajilla quede perfecta es dejar cierto espacio entre las piezas. Si tratas de aprovechar al máximo el espacio, es muy probable que la vajilla no quede todo lo limpia que desearías.
Coloca cada pieza en el lugar adecuado
Te aconsejamos colocar los utensilios de plástico en la parte de arriba y poner la vajilla más sucia en la parte inferior, puesto que en esa zona la temperatura del agua es más elevada. Además, recuerda colocar las sartenes y cacerolas bocabajo; comprueba que las aspas trabajan libremente y no chocan con el menaje; y, por último, recuerda dejar espacio entre los platos.
Limpia el filtro de manera regular
El mantenimiento adecuado de los electrodomésticos nos garantiza unos mejores resultados. Por ejemplo, es conveniente limpiar el filtro del lavavajillas cada mes y medio. Te llevará muy poco tiempo y prolongarás la vida útil del electrodoméstico.
Evita usar los programas a media carga
Puedes creer que poniendo el lavavajillas a media carga consumirás menos energía. Craso error. Activando este programa, es cierto que consume menos y gasta un menor porcentaje de agua. No obstante, si nos paramos a pensar, este ahorro no resulta rentable a largo plazo, teniendo en cuenta que ponemos en marcha el lavavajillas solo con la mitad de su capacidad. De hecho, resulta más rentable, a la larga, ponerlo en funcionamiento solo en el momento en el que esté lleno. De ese modo, aprovechamos todo lo posible su rendimiento, lo que supone una mayor rentabilidad.
Espera media hora antes de abrir el lavavajillas
A la hora de retirar los utensilios de cocina del lavavajillas espera un mínimo de treinta minutos antes de proceder a su apertura, con el propósito de que se evapore la humedad. Al abrirlo antes de tiempo, se produce un efecto de condensación y la vajilla queda mojada.
Vacía la vajilla desde abajo
Si comienzas por los utensilio de la parte superior, es muy posible que mojes las piezas de abajo con los restos de agua que hayan podido quedar en el cestillo del lavavajillas superior. Así que saca la vajilla desde abajo.
Evita los malos olores
Si, después de una comida, no hay vajilla suficiente para llenar el lavavajillas, por lo que decides ponerlo en funcionamiento más tarde, te recomendamos que actives al menos el programa de prelavado. De ese modo, enjuagará el menaje y evitarás olores desagradables. Por ejemplo, es una alternativa muy práctica cuando los platos tienen manchas de pescado u otros alimentos de fuerte olor.
A modo de conclusión, señalamos que, aunque pueda parecer que los lavavajillas están siempre limpios, por estar en contacto con jabón y agua, lo cierto es que no es así. Lavado tras lavado, la cal y grasa se acumulan en partes importantes del aparato, como los aspersores, tuberías y filtros, lo que puede dañarlo de manera definitiva. Por tanto, debemos usar un producto de limpieza específico para el lavavajillas cada treinta lavados, aproximadamente.