La eficiencia energética de una vivienda no sólo tiene como objetivo la reducción del consumo para el ahorro en las facturas, sino también para conseguir la reducción de la contaminación medio ambiental.
Es totalmente necesario reducir el efecto invernadero que sufre nuestro mundo, y se debe trabajar en todas las áreas. Si bien pensamos que las grandes empresas y edificios son los que más deben trabajar en este aspecto, lo cierto es que, a nivel doméstico, es necesario también reducir la contaminación.
Energía renovable para reducir la huella de carbono y mejorar la eficiencia energética
Utilice sólo energía de fuentes 100% renovables e implemente un nuevo modelo de eficiencia energética para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Como era de esperar, el uso exclusivo de fuentes de energía 100% renovables implica una reducción drástica de las emisiones de dióxido de carbono (CO2) en comparación con el uso de otras fuentes de energía. En este sentido, diversos estudios subrayan que cada contrato eléctrico enfocado exclusivamente en energías verdes evita en promedio la emisión de 2 toneladas de CO2 al año, el equivalente a sacar un coche de gasolina en un recorrido urbano de 15 kilómetros.
En este sentido, el año pasado solo los clientes de una comercializadora verde impidieron que se liberaran a la atmósfera unas 18.085 toneladas de este gas de efecto invernadero, según los cálculos de esta empresa, lo que conlleva la reducción indirecta de emisiones a cerca de 159.000 toneladas de sus clientes. en toda España, una cantidad similar a la retirada diaria de 79.425 vehículos de las calles.
Pero la lucha contra el cambio climático también se puede reforzar con nuevas herramientas de eficiencia energética que no se centren solo en reducir el consumo y potenciar las pequeñas instalaciones fotovoltaicas para el autoconsumo o la iluminación LED, como esta, es más habitual en el sector, abarcan otros aspectos como la formación del personal de la empresa, análisis detallado de instalaciones y máquinas, y nueva gestión de sistemas de contadores de energía.
Entre estos, el submetering, que se basa en el uso de equipos de medida independientes y adicionales al contador, que proporciona datos detallados en tiempo real sobre el consumo energético, que permite conocer el funcionamiento de cada sistema eléctrico por zonas, dispositivos o actividad. zonas.
Asimismo, el estudio de la energía reactiva, que es la demanda de energía adicional que necesitan ciertos equipos como motores y transformadores para su funcionamiento, incluida la reducción, además de evitar la pérdida de potencia en las instalaciones, entre otros efectos, también ayuda a reducir la huella de carbono.
Además, estas herramientas no solo ayudan a reducir las emisiones de CO2, sino que también a ahorrar en la factura de la luz, pudiendo lograr ahorros entre un 20% y un 30% mediante la optimización de sistemas y fuentes eléctricas utilizadas, debido al mercado energético existente y la competencia, Es muy difícil lograr ahorros significativos en la compra de energía de diferentes productores, puesto que el mercado está muy igualado.