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Ya ha llegado el verano y ¿a quién no le apetece un helado cuando aprieta el calor?. Cualquier momento parece perfecto para disfrutar de un sabroso y saludable helado, en el postre, a media tarde, después de cenar… pero muchas veces nos resistimos por temor a las calorías y nos privamos de los beneficios que algunos helados pueden aportar a nuestro organismo. La opción es que prepares tus propios helados caseros y saludables.
Para asegurarte de que los helados que consumes son totalmente sanos y no tienen exceso de conservantes e ingredientes artificiales puedes prepararlos en casa, hay muchas recetas. Los de leche, además, te aportan un extra de calcio.
Sin duda, con las altas temperaturas, pocas cosas son más apetecibles que un helado, y es cierto que algunos son auténticas bombas calóricas, pero no todos. Algunos son muy nutritivos, refrescantes y apenas tienen grasas.
Toma helados con moderación
Lo primero, ten en cuenta que son una fuente de calorías y que debes tomarlos con moderación, ya que pueden aumentar los niveles de colesterol y el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas o diabetes.
Lo ideal es que optes por helados artesanales, ya que sólo tiene un 6% de grasa. También puedes hacerlos tú mismo, reemplazando la leche entera por desnatada, utilizando edulcorantes y sustituyendo los ingredientes más calóricos por fruta, por ejemplo.
Además, ten en cuenta que el helado puede jugar una mala pasada en tu boca, provocando dolor y ligeros pinchazos en los dientes. Esta reacción tan típica en verano es síntoma inequívoco de sensibilidad dental, un problema que debe tratarse desde la raíz adquiriendo una buena rutina de higiene bucodental, utilizando un dentífrico específico y un cepillo suave para cuidar el esmalte.
Asimismo, la dieta siempre debe ser equilibrada, ya que es uno de los mejores hábitos de una vida saludable. Una opción puede ser hacer los helados en casa, así podrías reducir los ingredientes más perjudiciales. Hazte con una máquina de helados y echa un vistazo a tantas recetas faciles y saludables que tienes a tu disposición en internet.
¿Cuáles son los beneficios de tomar helados caseros?
Estarás de acuerdo con que los helados industriales, ya sean de leche o de hielo no son la opción más saludable, contienen mucha azúcar, conservantes y los primeros además mucha grasa. Optar por un helado casero, con productos naturales, será la opción más saludable, ya que, consumido con moderación, es un buen postre para cualquier persona que siga una dieta sana y equilibrada.
Aportan mucha energía
Un buen helado casero te ayuda a refrescarte, hidratarte y recuperar energía tras un esfuerzo físico, por ejemplo.
Además, los helados de hielo o polos son agua en un 90 %, por lo que constituyen una buena alternativa para hidratar el organismo, ayudando además a combatir la sequedad de las vías respiratorias.
Y uno de sus beneficios para nuestra salud es que previenen los resfriados, ya que acostumbran la garganta a temperaturas más bajas.
Los helados caseros son una fuente de calcio
Un solo helado de leche y/o yogurt (no de hielo) cubre hasta un 15% de la cantidad de calcio recomendada al día, contribuyendo a fortalecer los huesos.
Uno de los principales ingredientes del helado es la leche, y por ello el helado es rico en calcio.
¿Sabías que un solo helado de leche y/o yogurt (no de hielo) cubre hasta un 15% de la cantidad de calcio recomendada al día?, contribuyendo a fortalecer los huesos.
Son una fuente de vitaminas y minerales
Los helados caseros son una rica fuente de vitaminas.
Un helado de crema o leche aporta minerales como fósforo, magnesio, sodio, potasio, y vitaminas A, B2 y B6, según detalla la Asociación Española de Fabricantes de Helados (AEFH).
En concreto la vitamina B6 es esencial para la regulación de los procesos químicos del cuerpo.
Además, ayudan a comer más fruta, ingerirlos mezclados con fruta es una alternativa diferente para introducir ésta en nuestra dieta de forma más apetecible.
Los helados caseros son una fuente de proteínas
Al ser un producto derivado de los lácteos, estarás ingiriendo también proteínas de alto valor biológico. En concreto, 4’5 gramos de proteínas por cada 100 gr.
Su ingesta ayuda a reducir el nivel de estrés
¡Como lo oyes!, son un método infalible para ponernos de buen humor y reducir el estrés.
Esto se debe no sólo por el placer de degustar algo tan delicioso sino también, tal y como aseguran diversos estudios, porque algunos de sus componentes (como el azúcar o la caseína de la leche) actúan como exorfinas, que nuestro metabolismo convierte en endorfinas. Y estas sustancias tienen un efecto positivo sobre el sistema nervioso.
Cómo hacer helados caseros saludables
Una de las dudas que quizás estés planteándote es ¿cómo debe ser su consumo?. Lo esencial es la moderación. Tal y como se dice en el Libro Blanco del Helado, “El consumo de helados es un placer que nos podemos permitir siempre que lo situemos en sus límites razonables”.
Por supuesto, preparar helados en casa es una forma estupenda de disfrutar de un postre sano y delicioso, ya que te asegurarás de que todos los ingredientes sean naturales.
Helados caseros de frutas vs helados cremosos
Esta es la primera disyuntiva, ¿prefieres un refrescante helado de fruta o polo o a ti te va más un delicioso helado cremoso?.
Los helados de fruta, o polos, son los que más refrescan y quitan la sed en un día caluroso, ya sea en la oficina, en la playa o en el campo.
Además, es muy sencillo prepararlos porque entre los ingredientes se usan las frutas de estación. Son buenos para los que hacen dieta, porque son bajos en grasas, colesterol, calorías y azúcar.
Por otro lado, también puedes preparar unos deliciosos helados cremosos, que llevan en su mayoría leche, sirven tanto para el postre como para disfrutar en la merienda, por ejemplo. Estos no quitan la sed y hay que tener cuidado con la cantidad de azúcar que se le añade. Sin embargo, suelen ser los preferidos por su consistencia y sabor.
Helados caseros y naturales
Probablemente, ya habrás tomado la decisión de ponerte manos a la obra y sorprender a tu familiar este veranos con deliciosos helados caseros, naturales y saludables. Y puedes optar entre tres tipos de preparación: con frutas, con leche o yogur y con infusiones.
Helados con frutas
Para preparar helados caseros de frutas utiliza frutas de temporada de verano, ya que tienen mucha agua y un sabor más dulce. Por ejemplo, opta por sandía, melocotón, frambuesas, limón, etc, o haz una mezcla de varios ingredientes como puede ser melón, pera y manzana o cereza y naranja, tú eliges.
Para preparar estos refrescantes helados, trocea las frutas, añade hielo y mezclar en la batidora, formando un postre frío en minutos. Recuerda que cuántos menos aditivos lleve la receta, más natural y sano será el helado.
Helados con leche o yogur
La segunda alternativa para disfrutar helados saludables es la más popular debido a su consistencia y a que parece el helado que se compra. La leche y el yogur sirven como saborizantes y espesantes, además de ser ingredientes que siempre están en el refrigerador.
En este caso, puedes usar cualquier fruta que te apetezca, plátano, piña, fresas, melocotón, kiwi, etc, lo ideal son frutas carnosas.
Helados con té o infusiones
También puedes preparar helados saludables con infusiones o té granizado. Lo único que debemos hacer es el té como de costumbre, dejar que se enfríe y luego mezclar con hielo picado, igual que con las frutas.
Las sugerencias para helados más deliciosos son el té verde, el de canela, el de manzana, el negro, el de menta o el de hierbabuena.
Sugerencias para preparar deliciosos y sencillos helados caseros
Como equipamiento, sólo necesitarás un congelador y una batidora potente, mejor de las de vaso o batidora americana.
Son preparaciones para consumir en el momento, si las guardas mucho rato en el congelador después de hacerlas, se convierten en un hielo duro nada agradable. Además, son muy rápidas de hacer, si tienes los ingredientes congelados previstos.
Para granizados
Funcionan bien frutas muy acuosas como la sandía, el melón o los cítricos. Con frutas menos acuosas podemos hacerlo también añadiendo agua o una infusión que dará un sabor diferente.
Para helados más cremosos
El plátano da muy buen resultado, se puede combinar con otras frutas. La base de lácteo puede ser yogur natural, queso batido o yogur griego. Si lo queremos hacer vegano sirve la crema de coco, el tofu silken y los yogures de soja.
Evita añadir azúcar o usar lácteos u otros productos azucarados como base, la fruta ya aporta dulzor suficiente. También podemos añadir un dátil al batir.
Recetas sencillas para preparar tus helados caseros saludable
Granizado de sandía y menta
Comienza pelando la sandía y córtala en cubos, quitando las pepitas y congélalo. Cuando te apetezca el granizado solo hay que poner los cubos de sandía congelada en la batidora y darle unos golpes fuertes, o usar la posición de «picar hielo» si la tiene. No le des a batir continuo. Una vez troceados los cubos de sandía, ya tendrás el granizado que se sirve con una juliana de hojas de menta por encima.
Semigranizado de coco y café
Primero haz un café fuerte y congélalo en una cubitera. A la hora de hacer el helado pon los cubitos de café en la batidora y vete añadiendo leche de coco, de la que viene en lata y bate hasta que quede una textura entre helado y granizado. Se le puede poner algún edulcorante si no te gusta el café amargo. Esta opción es ideal para poner en un vaso y tomar con pajita.
Helado de yogur con fresas, cerezas o albaricoque
Congela las fresas o cerezas (u otros frutos rojos), o los albaricoques, limpios y sin rabitos ni huesos, y sigue el mismo sistema: bate junto con un yogur natural, o un yogur griego o de soja hasta obtener una textura cremosa. Añade el yogur poco a poco para controlar la textura que quieres. Se puede servir con unas almendras picadas por encima, por ejemplo.
Helado de bebida de almendra con plátano y chocolate negro
Corta plátanos a rodajas y congélalos. Cuando te apetezca tomar un helado echa las rodajas de plátano en la batidora y bate añadiendo poquito a poco la bebida de almendra fría hasta que quede una crema helada de la textura adecuada. Sírvelo con virutas de chocolate negro por encima. Hay que prepararlo en el momento de servirlo, o como mucho unos 15 minutos antes y guardarlo en el congelador. Si lo guardamos más tiempo en vez de tener textura cremosa será un cubo duro congelado incomible.
Crema de cacahuete con ciruelas y queso batido
Congela ciruelas secas, mejor a trocitos y una parte del queso batido (o tofu o yogur de soja si quieres hacerlo vegano). A la hora de batirlo pon en el vaso de la batidora las ciruelas congeladas y el queso, yogur o tofu congelado y lo bates añadiendo la parte de yogur, queso o tofu que no has congelado más un par de cucharadas de crema de cacahuete (o crema de algún fruto seco). Si puedes comprar la crema sin azúcar, mejor, las ciruelas secas ya aportan el dulzor necesario.
Existen muchísimas más recetas de helados caseros saludables y sabrosas y también puedes crear tus propias recetas, échale imaginación y este verano disfruta de este rico postre.
Hasta el próximo post y ¡feliz comienzo de verano! 🙂